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Alfabeto Griego Maligno: Xi

Publicado por Trablete a las 11:18 en , ,
Conocí a esta letra ya en la carrera, en la asignatura de cálculo. Fue una primera experiencia desconcertante, como que te presenten a una persona borracha. Esa primera impresión fue a todas luces incorrecta. 

La mayoría de los matemáticos curtidos con miles de horas lectivas están hartos de dibujar los símbolos una y otra vez, no sólo a lo largo de los años, sino a lo largo de una misma clase. Un ejemplo claro es a la hora de trabajar con límites, en el que la "i" y la "m" de lim se convierten en unas onditas a la derecha de la "l" o, en el peor de los casos, en una raya horizontal. Otro caso como éste se da con la letra que nos ocupa. La primera  vez que pintan esta letra en la pizarra, pintan algo así: 


Y tú te ves, pobre niño de primero de carrera, intentando copiar ese rayo de Zeus que han puesto por variable. Posteriormente, me informo de que la letra en cuestión se llama Xi, que su grafía en mayúsculas podría pasar por un kanji japonés, y que lo que el profesor estaba harto de dibujar era esto: 

"Posteriormente me informo" significa que fui a un diccionario a mirar; en aquellos tiempos ni existía google. 

Pues tengan cuidado con ella, que tiene dientes afilados, probable capacidad para inocular veneno, cuerpo escurridizo, gorra con visera hacia atrás y gafas de sol, al menos en su versión maligna:


Si eliminamos los dientes, mi mujer le ve un parecido con Catwoman, con el maxilar inferior a modo de pecho. Una Catwoman un tanto reptiliana, pero esos detalles no importan demasiado cuando encuentras parecidos.

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Cubo Bedlam

Publicado por Trablete a las 09:07 en , ,
El cubo Bedlam es un rompecabezas compuesto de 13 piezas cuyo objetivo es formar con ellas un cubo de 4x4x4. Lo compré allá por el año 2008 en una feria del libro. Fue todo un acierto, es un puzle genial. Dice tener 19186 soluciones. Aún no las he hecho todas ;) Esta entrada trata de las 10 primeras que he logrado.

Le juro, señora, que venía montado.

A la compra del cubo, leímos sobre él y vimos que era endiabladamente difícil de resolver, así que tuve la curiosidad de apuntar la fecha de la compra, para ver cuántos años tardaba en lograr solucionarlo. Fueron casi dos meses jugando con él hasta lograr la primera. Ya no recuerdo si lo cogía todos los días, pero es probable que sí. Había que probar y probar y probar y probar y probar el juguetito, claro.

También leímos que cuando salió el cubo, daban como premio un cubo Bedlam especial por enviar tu solución, pero lo cogí tarde. Hoy en día no tiene sentido, con la cantidad de soluciones que hay por ahí publicadas. Existe incluso un generador de soluciones.

Del entorno que me rodea, soy el único que lo ha resuelto. Esto no es justo decirlo, porque yo soy el que más se ha obsesionado ha jugado con él. Tenemos fotos llamadas "Bedlam 1 - Marta 0" de una de tantas veces que la gente en casa jugueteaba con él.

En las fotos de las soluciones aparece el cubo solo, pero a mi me gusta jugar usando la caja de molde, como en la primera foto. Lo veo más cómodo, aunque hay gente que prefiere montarlo sin ella.




La primera solución. Pensaba que sería la única. Como no me parecía suficiente con cuatro o cinco fotos, dibujé todas las proyecciones de las caras del cubo y, como no me pareció suficiente, dibujé algunas vistas del proceso de montaje.
Segunda solución. No me lo podía creer. Incluso hice un HDR para la ocasión.


Tercera solución. De ésta no tenía foto. A saber qué pasaría. Quizá vinieron unos extraterrestres, y me quitaron la cámara con una espátula. El caso es que la foto es de ayer, aún está calentita.


Cuarta solución. 
- Su Bedlam, señor. Espere, que le traigo cuchillo y tenedor. 
+ No hace falta, tráigame sólo el tenedor.





Quinta solución. Ayuda bastante colocar la cruz roja y la escalera amarilla juntas para desembarazarse de ellas





Sexta solución. Tardé seis soluciones en darme cuenta de que para representar las vistas 3d era mejor la perspectiva militar que la isométrica. La militar es como la conocida perspectiva caballera, solo que la cara que no sufre deformaciones es la base, no un lado. No me gusta mucho la militar, pero así se comprende mejor el dibujo.





Séptima solución.





Octava solución. Hace algunas soluciones, a la hora de dibujarla, me daba cuenta de que siempre tenía la cruz roja pegada a una de las caras (la manera más fácil de desembarazarse de ella), así que me propuse hacer una solución en la que no ocurriese eso. Y aquí está. En las proyecciones se ve claro. El único rastro de la cruz son dos de esos cuadraditos rojos.

Novena solución. Suelo dejar para el final la pieza azul de la parte superior, porque es plana y me resulta más fácil componer un hueco para ella o la escalera. He intentado dejar para el final la cruz, pero no he llegado a nada.





Décima solución. Ésta también es con la cruz "escondida".




Aquí estamos contemplando la montaña desde la cima, pero por el camino están todos los demás fracasos. Uno de ellos fue muy curioso. Pensaba que tenía otra solución... pero no. El hueco que quedaba era para una simetría de la pieza que faltaba:   


No diré que he llegado a soñar con el cubo, pero sí que tras jugar un buen rato, a veces me asaltaba la idea de que tal pieza encajaba en ese hueco del salón. Y en el trabajo también. Esto lo hice en un momento de descanso, de memoria. Por eso hay una pieza que está mal:   


Ahora que me he mudado, el cubo permanece en su caja cerrada, es decir, montado. El estado usual era medio montado, y con las piezas sobrantes colocadas apresuradamente, a modo de ensalada. Aún no me sé ninguna solución de memoria como para montar rápidamente el cubo. 


Mi próximo reto es montar dos soluciones el mismo día. Estuve cerca con las soluciones novena y décima, que fueron en días consecutivos. Ya veremos en qué queda eso.




Mi Propio Pastito Interior